Argelia cuesta a los contribuyentes franceses 9.160 millones de euros al año

La eurodiputada Sarah Knafo hizo una declaración pública contundente ayer, jueves 6 de febrero de 2025, al afirmar que Argelia cuesta a los contribuyentes franceses 9.160 millones de euros anualmente, tres veces más de lo que cuestan los territorios de ultramar franceses. Una cifra que ella califica como «el precio de la debilidad» en las relaciones bilaterales. Presentado en un simposio en París titulado «Europa-Magreb: Basta de ingenuidad, es hora de orden», el desglose expone los gastos relacionados con la ayuda al desarrollo, las facturas públicas impagas y los costos asociados a la inmigración.

El desglose de los 9.000 millones de euros: de la ayuda al desarrollo a la delincuencia

El análisis de Knafo, basado en agencias gubernamentales francesas, instituciones internacionales y registros públicos, detalla los costos atribuidos a Argelia de la siguiente manera:

  • 136 millones de euros: Ayuda pública anual al desarrollo para Argelia.
  • 100 millones de euros: Facturas impagas de ciudadanos argelinos en hospitales públicos franceses.
  • 880 millones de euros: Reclamos fraudulentos de pensiones vinculados a Argelia.
  • 2.000 millones de euros: Pérdida de ingresos fiscales (IVA e impuesto sobre la renta) debido a transferencias financieras a Argelia.
  • 1.600 millones de euros: Prestaciones sociales para ciudadanos argelinos en Francia.
  • 1.500 millones de euros: Vivienda social para inmigrantes argelinos.
  • 380 millones de euros: Costos de estudiantes argelinos en universidades francesas.
  • 260 millones de euros: Gastos relacionados con inmigrantes argelinos indocumentados.
  • 2.200 millones de euros: Costos del sistema de justicia penal, encarcelamiento y delincuencia relacionados con delincuentes argelinos.

Total: 9.160 millones de euros al año, una suma que Knafo equipara a «tres veces el presupuesto de los territorios de ultramar franceses», y que supera la financiación total del Ministerio de Agricultura.

La respuesta de Argelia y las críticas de Tebboune

Estas nuevas cifras llegan semanas después de la declaración inicial de Knafo, en la que estimó que la ayuda anual al desarrollo de Francia a Argelia rondaba los 136 millones de euros. Sus afirmaciones fueron rechazadas de inmediato por el presidente argelino Abdelmadjid Tebboune, quien calificó las cifras de «infundadas» y la acusó de «profunda ignorancia». Las autoridades argelinas sostienen que la ayuda anual de Francia oscila entre los 20 y los 30 millones de euros.

En el simposio, Knafo subrayó que la carga financiera de Francia es «inaceptable»: «9.000 millones de euros es el precio de la debilidad de nuestros líderes frente a un régimen hostil. Esto debe terminar.» Vinculó estos costos a lagunas sistémicas, incluyendo la evasión fiscal debido a las remesas enviadas a Argelia y el fraude en el sistema de pensiones.

Prestaciones sociales, vivienda y seguridad

Los mayores gastos se concentran en prestaciones sociales (1.600 millones de euros) y vivienda (1.500 millones de euros) para ciudadanos argelinos en Francia. Los críticos argumentan que estos costos reflejan desafíos más amplios en la política de inmigración, y no exclusivamente la relación con Argelia. Por otro lado, los partidarios de Knafo insisten en que las cifras evidencian el fracaso de Argelia en la gestión de su diáspora.

El costo del sistema judicial y penitenciario (2.200 millones de euros) también genera controversia. Aunque las estadísticas francesas sobre delincuencia rara vez identifican nacionalidades, el equipo de Knafo cita datos de la administración penitenciaria, que indican que los argelinos representan el mayor grupo de reclusos extranjeros.

Knafo está ganando cada vez más apoyo en su llamado a la rendición de cuentas, impulsando a sectores que exigen auditorías sobre los acuerdos bilaterales. Entre las propuestas figuran la reducción de la ayuda al desarrollo, una supervisión más estricta de los beneficios sociales y la renegociación de tratados fiscales para frenar la fuga de ingresos.

Será difícil para el régimen militar argelino responder con cifras y datos concretos. Su reacción probablemente se limitará a burla, negación y retórica anticolonialista. Veremos si el régimen en Argel publica cifras financieras alternativas.

Por Abderrahmane Fares

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