¿A dónde van los millones de dólares recaudados por los consulados de Argelia en el extranjero?
Hay 193 países miembros de la ONU. De estos, 162 están representados en Francia por embajadas y/o consulados.
Argelia es el país con más consulados en Francia, con un total de 18. Junto con Alemania, es el país que tiene el mayor número de consulados en Francia.
Estos consulados, en términos simples, no están destinados a hacer política. Cumplen una función administrativa comparable a la de los ayuntamientos, pero exclusivamente para sus ciudadanos.
Así, un consulado está autorizado para legalizar documentos como poderes notariales destinados a ser utilizados en el país que representa.
Por ejemplo, un consulado argelino legaliza los poderes notariales de ciudadanos argelinos, permitiendo que estos documentos autenticados se utilicen en Argelia para diversos trámites administrativos.
Para legalizar su poder notarial o cualquier otro documento, el ciudadano del país correspondiente debe comprar un timbre fiscal en el consulado. Hasta hace menos de dos años, el precio del timbre fiscal para legalizar un poder notarial era de 0,50 euros. Hace unos meses, el precio de este timbre subió a… 5 euros. Es el timbre fiscal más caro de todos los consulados de África y del mundo árabe. ¿Por qué este aumento tan significativo?
Según información interna, el número promedio de documentos legalizados diariamente en un consulado argelino típico es de aproximadamente 120.
Por lo tanto, si consideramos 18 consulados y un promedio de solo 100 legalizaciones diarias por consulado, obtenemos un total de 1.800 legalizaciones diarias en todos los consulados. A 5 euros por legalización, esto genera unos ingresos diarios de 9.000 euros, únicamente por legalizaciones.
Si añadimos los ingresos de otros consulados de Argelia en todo el mundo, podemos estimar fácilmente que la cantidad recaudada de la diáspora asciende a varios millones de dólares.
Entonces, ¿a dónde va ese dinero?
Nadie sabe a dónde va ese dinero. ¿Se ha establecido oficialmente un «fondo negro», como el que llevó a la caída de Bouteflika a principios de los años 80?
Lo único seguro es que este dinero no se utiliza para pagar al personal local, al personal diplomático enviado desde Argelia ni para el mantenimiento de las instalaciones. Todos estos gastos están presupuestados a nivel central, es decir, por el Ministerio de Asuntos Exteriores, según un exvicecónsul que ha presenciado muchas irregularidades en los distintos consulados donde ha trabajado.
Además, los argelinos no solo pagan timbres fiscales mucho más caros que los ciudadanos de los países vecinos, sino que también pagan mucho más por los billetes de avión y ferry. Un vuelo París-Argel con Air Algérie cuesta más que un vuelo París-Nueva York con Air France.
Si el régimen argelino es inhumano con «su» pueblo, ¿por qué habría de ser generoso con los exportadores occidentales?