La explosión de la burbuja de Mehdi Ghazzar bajo la vigilancia del servicio de seguridad interior francés
El 23 de enero de 2025, la revista francesa l’Express publicó una investigación detallada sobre la trayectoria controvertida de Mehdi Ghezzar, un ex comentarista de radio convertido en «agitador de agitadores» y una figura central en la retórica anti-francesa. Aunque destaca sus conexiones en los más altos niveles del estado argelino, l’Express revela que buscó reuniones con figuras políticas francesas, incluso negando algunos de estos encuentros, y que está siendo monitoreado por la DGSI debido a sus lazos ambiguos con Argel. Presumiendo de ser un «hijo del sistema», combina ambiciones presidenciales con un papel de intermediario no oficial, lo que genera dudas sobre sus verdaderas intenciones.
La investigación de L’Express publicada el jueves 23 de enero de 2025: entre bastidores de la controvertida búsqueda de Mehdi Ghezzar para posicionarse como el mediador indispensable entre Francia y Argelia.
REUNIONES DRIENCOURT-SEMMAR PARA UNA CANDIDATURA PRESIDENCIAL
Según relatos consistentes de Driencourt y Semmar, Mehdi Ghezzar habría organizado por su propia iniciativa dos reuniones en París en 2023 para discutir una posible candidatura en las elecciones presidenciales de Argelia de 2024. Supuestamente se presentó como «anti-sistema» y «anti-Tebboune», buscando consejo y contactos de opositores establecidos en Francia. Sin embargo, Mehdi Ghezzar niega categóricamente haber encontrado a estos dos individuos, a pesar de las pruebas escritas y testimonios directos: el 22 de marzo de 2023, en el restaurante Les Princes cerca de Porte de Saint-Cloud, donde Driencourt afirma haber hablado con él, y el 9 de mayo de 2023, durante una reunión a la que asistió Abdou Semmar.
Ghezzar refuta lo que parece innegable y fomenta la incertidumbre sobre sus motivos: ¿pretende presentarse como opositor al presidente Tebboune mientras se le percibe como cercano a quienes están en el poder? Esta ambigüedad alimenta las sospechas de que su narrativa cambia según su audiencia, objetivos y oportunidades. Ostensiblemente lleno de contradicciones, Ghezzar a veces se describe a sí mismo como un crítico del régimen argelino, incluso como un posible candidato presidencial, mientras proclama su apoyo al presidente en ejercicio y se presenta como un intermediario cuasi-oficial en asuntos diplomáticos.
Según sus críticos, esta estrategia de sembrar confusión le permite infiltrarse en los círculos de toma de decisiones mientras oculta su verdadera agenda. En pocas palabras, Mehdi Ghezzar es visto como un oportunista que deslumbra a sus interlocutores con retórica grandilocuente y mentiras, paralizándolos con la audacia de sus afirmaciones.
BAJO VIGILANCIA DE LA DGSI
L’Express informa que está siendo monitoreado por la DGSI (Dirección General de Seguridad Interior de Francia) debido a sus conexiones en los niveles más altos del gobierno argelino. El 17 de enero de 2025, intentó reunirse con Louis-Xavier Thirode, Subjefe del Estado Mayor del Ministerio del Interior, y Bruno Retailleau, Ministro del Interior. Para contextualizar, el 17 de enero de 2025 fue una semana después de la intensa crisis de los «influencers» iniciada por Argelia, que negó la entrada a sus propios ciudadanos con el fin de «humillar» a Francia. Ghezzar afirmó a los franceses que posee información sensible sobre varias figuras argelinas, incluido el escritor Boualem Sansal. Presentándose como un «missus dominicus» (un enviado político), afirma actuar como un canal de comunicación no oficial entre Argel y París. Sin embargo, su postura está lejos de ser aceptada de manera unánime. Un alto funcionario ejecutivo, citado por L’Express, señala su cercanía a la presidencia argelina mientras observa el alto nivel de desconfianza que inspira.
Esta desconfianza se ve alimentada aún más por su actividad mediática: frecuentes apariciones en el canal público argelino Al24 News, su autoproclamación como director de la campaña de Tebboune en París y planes vagos para crear un «lobby DZ» destinado a promover los intereses argelinos en Francia.
SU NARRATIVA DE «NIÑO DE ORO, HIJO DEL SISTEMA» NO SOPORTA UN ANÁLISIS SIMPLE
El trasfondo familiar de Mehdi Ghezzar es igualmente intrigante. En la televisión argelina, menciona con orgullo a un padre que estaba «cerca de Houari Boumediene», el ilustre presidente argelino después de la Guerra de Independencia. Cuando L’Express le preguntó sobre este tema, se mostró evasivo de manera abrupta: aunque reconoció que su padre ocupó varios roles diplomáticos (cónsul, cónsul general, encargado de negocios en varios países), se negó a revelar su nombre o elaborar sobre sus verdaderos lazos con la élite política de Argelia. Aunque L’Express no pudo revelar la identidad de su padre, nuestra investigación sí logró hacerlo: el padre de Mehdi Ghezzar es Abdelkrim Ghezzar.
Según nuestras fuentes, la carrera diplomática de Abdelkrim Ghezzar, padre de Mehdi Ghezzar, comenzó solo a finales de 1972 bajo el régimen de Houari Boumediène, siete años después de que Boumediène tomara el poder en 1965 y seis años antes de su muerte en 1978. En otras palabras, esta supuesta «cercanía» con el presidente es tan plausible como un jugador de banca que afirma haber dirigido todo el partido. Por lo tanto, no es sorprendente que Mehdi Ghezzar evada las preguntas de L’Express: sabe perfectamente que sus declaraciones son solo presunción y poca sustancia, y que incluso el más mínimo escrutinio desvelaría su invención, como acabamos de demostrar.
Izquierda: Los vínculos empresariales de Mehdi Ghezzar demuestran sus lazos con las familias Mehri y Raouraoua. Derecha: Mehdi Ghezzar, miembro de la red argelina que inició una campaña de guerra híbrida en territorio francés.